La serenidad que viene de parte de Dios es una sensacion
de bienestar,nos hace pensar antes de decidir en cualquier
circunstancia.En nuestros momentos serenos podemos
escuchar la voz de Dios.Que la serenidad que nos da Dios
nos enseñe a adueñarnos de nuestras emociones
adquiriendo
fortaleza,no solo para dominarnos,sino para soportar y
afrontar la adversidad sin afectar el trato y las relaciones
con nuestros semejantes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario